Comerse una tutsi pop

Hay pocas cosas comparables al de dar placer a un hombre hasta el punto que prácticamente lo tengas en tus manos, como arcilla fresca.

Y con el hecho constatable de que la mayoría de ellos piensan primero con un órgano que esta, para mi gusto, demasiado alejado del cerebro, no es de extrañar que la forma mas eficaz de volver a un hombre loco de placer sea el sexo oral.

Si lo dudan podríamos hacer una encuesta preguntándoles a algunos de los hombres  una simple y sencilla pregunta:
“Si te doy a escoger entre amputarte la mano izquierda y el pene ¿a cuál elegirías? "

En lo particular escuchar la palabra oral me recuerda a mi maestra de español en primaria y sus cientos de oraciones separadas en sujeto y predicado, si, la expresión oral y escrita no es para nada una imagen muy erótica.

Y si bien es cierto que también se le puede llamar felacion, la palabra parece más un insulto que otra cosa, para nada antojable.

Así que yo prefiero pensar en esta forma de hacer el amor en particular como comerse una paleta.

Y es que la analogía no esta muy alejada de la realidad, hay paletas dulces y picantes, las que compran solo los niños ricos y las que siempre están en cualquier tienda, grandes como una rocaleta o mucho mas pequeñas.

Para mas de una mujer  el pensar en comerse una paletita no esta entre sus diez cosas favoritas, ya sea aversión, falta de conocimiento o simple sentido erróneo feminista, la decisión de hacerlo o no es de cada uno, pero tener cierta información para llegar al centro de la tutsi pop puede ser interesante, el morderla o no es puramente personal…

Lo principal es recordar la lección mas vieja de mamá: Preguntando se llega a Roma.
Si no se puede perder el miedo a preguntar que le gusta a la paletita, ni pensar en hacerlo
No hay reglas definidas, esto para nada es una ciencia exacta, pero en esta vida siempre hay puntos que tener en cuenta:

·  Tomar el pene firmemente con toda la mano, rodeándolo y no solo con dos o tres dedos como si fuera una pluma. Esto te ayuda a evitar introducir demasiado el pene en tu boca.

·  Las caricias circulares con la lengua, en el glande, son muy agradables

·  La zona más sensible del glande es la cara inferior, o sea, el frenillo. En el caso de los hombres con circuncisión, es la piel que se encuentra en esa zona.

·  Si tu pareja te solicita que le des ligeros mordiscos, hazlo con mucho cuidado. Es más fácil si resbalas tus dientes por el cuerpo del pene (como si estuvieras comiendo un elote). Evita mordisquear el glande.

·  También puedes acariciarle el cuerpo del pene con la lengua, subiendo y bajando como si dibujaras grecas en zig zag.

·  Otra forma es que con la mano le acaricies el pene como lo "masturbaras" mientras con la punta de la lengua le acaricias el glande. Esto evita que te canses.

No necesitas recorrer todo el camino para que tú y tu chico puedan llegar a la cima del placer. Todo con una paleta o un pequeño caramelo, pero eso será en otra ocasión...

Terra