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lunes, 8 de noviembre de 2010

Sostenme - Capítulo 4

Bella

“La segunda cosa que adoraba al llegar a casa era escucharte, la primera era tocarte”
Emmett McCarty

Abrí los ojos para encontrarme directamente la hora en el reloj despertador, era demasiado temprano para que incluso la alarma de las 8 sonara, otro domingo, incluso el de la semana anterior hubiera sido insoportable, lloraría lentamente y en silencio sin que nadie estuviera ahí para notarlo, prendería el televisor y miraría el video de mi boda hasta quedarme dormida de nuevo.
Sintiendo un vació en el pecho de se tragaba todo desde dentro.
Esta vez no, pues aunque mis ojos se llenaron de lágrimas casi por pura costumbre y tragué el nudo en la garganta había alguien más por quien levantarme, tenia que hacerlo, pronto Tanya querría su mamila, esperaba poder prepararle algo a Anthony y cambiarlos para que pasaran el día con Edward antes de salir rumbo a la casa de papá.
Parpadeé mirando al habitación, todavía parece demasiado ajena y demasiado extraña, pero en silencio aceptaba que aquello era mejor que morir ahogada entre los recuerdos de la habitación que compartí con Emmett, pero no estaba muy segura si eso me hacia sentir bien o no.
Me levanté mirando en el espejo del sencillo tocador mi reflejo, la camiseta de el siempre había parecido enrome en mi pero a le encantaba que la llevara, era lo único que había traído de el.
Me limpié las lagrimas que había comenzado a agolparse en mi ojos aun antes de que cayeran por mi rostro y comencé a cambiarme.
Media hora después estaba con Tanya en mi brazos mientras ella bebía su leche con gran determinación, sonreí al mirarla, era una bebe hermosa, pero había algo mas en ella, una fuerza innata, irradiaba seguridad, Esme decía que era identica a Maggie, su madre, probablemente seria de esas chicas que atraían a todos como moscas, una líder nata y si una tremenda belleza.
-Tu hermano tendrá serios problemas cuando crezcas-, le dije mientras quitaba la mamila vacía de su boca, le sonreí y ella correspondió mientras la arrullaba, imaginar  Edward y todo el camino que faltaba por recorrer en su vida cuidando de sus hermanos, era algo que pocas personas podrían llegar a entender.
El se había quedado sin sus padres y había heredado dos responsabilidades que la mayoría de las personas en la actualidad tratan de eludir, Edward amaba en sus hermanos, se notaba en solo una mirada, pero también en sus ojos verdes había rabia, miedo, cansancio y dolor, cada día que pasaba sentía que estaba mirándome en ellos.
-¿Jamás hubiera pedido ayuda verdad?-, le pregunté a Tanya bajito mientras ella comenzaba a cerrar los ojos,...el no lo habría hecho y yo tampoco, así que le debía a Esme mucho mas de lo que hubiera dicho alguna vez.
Sentí el peso calido del cuerpecito de Tanya y cerré los ojos, los conocía de solo una semana y ya entendía por que Edward luchaba todos los días por empujar detrás los sentimientos que trasmitía su mirada...

-Vamos ir al parque Bella-, repitió por casi décima vez Anthony mientras terminaba de servirle el desayuno, Edward rodeó los ojos ligeramente mientras yo sonreía.
-Me lo dijiste cuando te ponía tu ropa ¿recuerdas?-, le pregunté.
-¿Vas a jugar con nosotros?-, preguntó casí brincando en su silla
-Bella va ir a otro lado-, le explicó Edward mientras Anthony me miraba con el ceño fruncido.
-¿A donde?-, preguntó con la autoridad de un niño de 5 años
-Voy a...tengo que comprar unas cosas-, le dije mientras el volvía su mirada a su comida, noté los ojos de Edward fijos en mí, el sabía que iría a comer con mis padres, pero no veía la forma de explicarle eso a Anthony, no ahora, los ojos de Edward dijeron un "gracias" en silencio. Volví la atención al Cullen más pequeño y enojado.
-Esta bien, te voy a contar la verdad, iba a comprar todo lo que necesitamos para hacer galletas pero...-, comencé mientras Anthony me miraba con una sonrisa.
-Yo quiero hacer gayetas-, dijo alegre de nuevo.
-Entonces dejaremos que Bella compré lo que necesita mientras nosotros vamos al parque-, terminó Edward al tiempo que su hermano asentía con entusiasmo.

Después de una rápida parada fuera de itinerario en el centro comercial y encargarme de que comparar todo lo necesario para las galletas, llegué a la casa de papá. Desde la muerte de Emmett había declinado una y otra vez las invitaciones para la comida en familia, pues sabía que sería como ponerse sobre un microscopio a esperar que evaluaran mi estado.
El auto de Phil ya estaba ahí, el nuevo esposo de mamá era de los pocos que podía compartir unas horas con el ex esposo de su mujer.
Siempre me había sentido feliz de que papá y mamá se llevaran bien y de que mamá hubiera rehecho su vida, pero después de quedarme sola, sin lo mas importante en mi vida aquel acuerdo en el que ellos se comportaban como personas civilizadas me parecía mero teatro.
Charlie Swan me abrió con una sonrisa y me invito a pasar, Phil y mamá salieron de la cocina para recibirme.
-Bella que bueno que hayas venido-, dijo mamá mientras me abrazaba correspondí el gesto tenuemente y nos encaminamos hacia el comedor.
-¿Como estas con el cambio?-, preguntó Charlie después de tomar un poco de su cerveza.
-Bien, he estado muy ocupada, Carmen, me ha ayudado bastante, ella cuidaba a los niños antes-, expliqué mientras el asentía.
-Sigo pensando que seria mejor que te hubieras mudado a casa e ir a cuidarlos uno o dos días-, replicó Reene con tono amable, sabía que lo decía de corazón, intentado ayudarme pero si antes el mudarme con ella y con Phil había sido una mala idea, ahora no era una opción.
-Ellos necesitan a alguien ahí, siempre-, expliqué mientras mamá comía otro poco de su plato.
-Esa familia a sufrido mucho-, intervinó Phil
-Yo creo que los niños estarían mejor con Esme y Carlisle-, dijo mamá con la voz marcada dando su opinión contundente, algo en mi saltó, nadie debería tener el derecho de opinar en algo que no entendían, ni siquiera ella, Anthony y Tanya eran la vida de Edward, sin ellos, no concebía siquiera imaginar que sería de el o...de mí
-¿Crees de verdad que alejarlos de la persona que aun queda en su vida estaría bien?-, le pregunté mas mordaz de lo que quería, Charlie dejo de comer y me miró al igual que Phil.
Mamá suspiró.
-El sobrino de Esme es joven Bella
-Los quiere mas que a nada, eso debería contar de algo ¿no?
Me levanté disculpándome casi sin voz y me dirigí a la cocina, necesitaba calmarme y respirar profundamente, minutos después Charlie entró con algunos platos sucios.
-Lo siento.-, musité mientras el sonreía.
-Reene estaba preocupada de que otra vez hablará sin pensar-, explicó
Bajé la mirada sin saber como explicar aquel arrebato.
-La verdad es que yo deseo conocer a los pequeños, han hecho que hagas una escena en el comedor, esperé esa actitud toda tu adolescencia-, bromeó haciendo que rodeara los ojos y riera suavemente
Cuando volvimos a la sala de estar, mamá sonrió y me contó todo sobre su próximo viaje con Phil, -el que sabía había retrasado por mí-.

Tomé un taxi para regresar a la casa de Edward, el caminó de vuelta pareció eterno, me di cuenta que había extrañado tener a Anthony pensando en otra travesura u ocurrencia, tener a Tanya en mis brazos, la emoción que sentía Anthony al ver a Edward  llegar a casa.
El conductor se estacionó en frente de la casa y pagué mientras notaba a Edward sentado en el segundo escalón de la entrada, estaba comenzando a anochecer y el humo del cigarro era casi visible como un halo sobre el.
Conforme caminaba acercándome su expresión iba provocando un nerviosimo que erizaba mi piel, Edward tenía los ojos rojos, la mandíbula completamente tensa y daba caladas a su cigarro como si no hubiera otra cosa mejor que hacer.
-¿Y los niños?-, pregunté abrazándome a mi misma, la blusa y los jeans no protegían mucho del clima de la media tarde.
El cerró sus ojos un momento antes de responder.
-Dormidos-, murmuró mientras señalaba con desanimo el aparato para escuchar en su habitación que el mantenía a su lado.
Sabía que tenía la opción de entrar a la casa y dejarlo solo, pero no podía moverme, me obligué a mi misma a acercarme y sentarme a su lado manteniendo cierta distancia, miré hacia el frente y aferré mis manos a mis rodillas.
-¿Que paso?-, le pregunté suavemente sin mirarlo.
El guardó silencio por tantos minutos que creí que no contestaría, el cigarro se había terminado cuando el habló.
-Estaba mirando a Tanya solo un momento, el sol comenzaba a ponerla incomoda, acomodé la visera de la carreola mientras era conciente de Anthony jugando a mis espaldas, había muchos niños, el se había llevado una pelota que hacia el intento por patear hacía mi.
Respiró fuertemente antes continuar, me miró con los ojos llenos de temor, ansiedad y enojo, quería entenderlo, necesitaba entenderlo.
-Cuando me giré de nuevo no lo vi, no estaba entre los niños frente a mi, en ese instante todo el cuerpo me pareció helado, todo desapareció, por un momento me dejé llevar por la desesperación, no debió ser mas de un segundo por que me giré para tomar a Tanya dejando la carreola ahí y comencé a gritar su nombre, no lo veía ni a el ni a la maldita pelota
Se detuvo un momento y yo esperé, el necesitaba sacarlo
-Caminé alrededor gritando su nombre  mientras todos comenzaba a murmur a mi paso, me alejé un poco mas hasta el camino de corredores y lo miré con la pelota fuertemente abrazada a su cuerpo, una mujer y un hombre hablaban con el poniéndose a su altura, una niña de coletas estaba cerca del señor, con una bicicleta a su pies. Me acerqué con el corazón dando tumbos y Tanya moviéndose incomoda.
Ella le estaba diciendo que encontrarían a su mamá Bella, ¡a su mamá!, le preguntaban como eran sus papas y Anthony solo apretaba fuertemente la boca, sus ojos se estaban llenando de lagrimas, murmuré su nombre con esfuerzo tragándome todo lo que sentía, el me miró y corrió soltando al pelota, abrazando mi pierna mientras Tanya comenzaba a llorar.
Se quedo callado por un minuto o más mientras yo miraba hacia la noche.
-Gran espectáculo debimos haber dado-, susurró mientras yo lo miraba, el sostuvo sus ojos en los míos un momento antes de girar su rostro.
-Di las gracias tragándome la explicación sobre...el accidente a esas personas, si no lo hacía terminaría estallando.
Se rió sin humor después de un momento más.
-A veces me imagino que si hubieran podido saber lo que pasaría sin ninguna forma de evitarlo Maggie dejaría a  todos la forma de llevarlo, me diría como lidiar con todo, con situaciones como esa, me diría como apagar el miedo a perderlos, y claro papá me diría que yo podría hacerlo.
Terminó con la voz quebrada, cerró la boca firmemente mientras lentamente uní su mano a la mia, sin pensarlo, el me miró y yo le sonreí con ojos cristalinos.
-Aun así, aun cuando te digan lo que hay que hacer después de que se vayan a veces no es suficiente-, susurré mientras el apretaba mi mano.
-¿Piensas en el?-, preguntó casi como si no se atreviera a formular la pregunta, desvió la mirada un momento.
-Todos los días-, acepté
-En que diría en un momento dado, que seria lo que haría...
-...como se burlarían-, terminó Edward haciendo como ambos sonriéramos con tristeza, su pulgar acarició mi muñeca mientras yo pasaba mis dedos por su palma.
-Gracias-, susurró. Lo miré un momento mas sintiendo la calidez que iba adoptando su piel fria
-¿Vamos dentro?-, pedí, el asintió mirándome mientras ambos nos levantábamos sin ni una palabra mas.




7 comentarios:

  1. Siempre termino con el corazon hecho trizas, no puedo me has hecho llorar, OMG!!! Sabes como trasmitir esos sentimientos, me senti como si quien hubiese perdido un familiar fuera yo, todavia me duele el corazon.
    Gracias por actualizar tan pronto, esta es una de mis historias favoritas.

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  2. holaaa Cell...siempreee terminoo llorandooo ...el capii estuvo espectacularr..edward y bella se entiendenn y como bellla lo defendio en la comidaa..y no me quiero imaginar la angustia que paso edward cuando perdioo de vista a anthonyyy...esta historia me encantaaa y estaa hermosaa y muy emotivaaa...y realistaa!!! bueno noss leemos en el siguientee...besoss!!!

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  3. Que tristes estan, me gusta como se ve que los nenes comienzan a devolverle el sentido de estar a Bella, que la necesiten...
    Pero... ¿ellos se tocaron?! aunque aun no tienen consuelo...
    Un placer leerte, en las dos puntas del espectro, la mas triste (esta historia) y la mas alegre (sin medidas) de tu pluma.

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  4. Que lindo... yo ser lo que son los nervios y el miedo de perder a alguien asi jajaa
    es bastante jodido.. amo tanto esta historia...siempre me saca lagrimitas..

    besitos!!
    Mel♥

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  5. Bueno me he tardado en comentar pero quién dijo que trabajar y estudiar era fácil? Cómo sea, siempre que termino de leer un cap nuevo me deja con lágrimas en los ojos :'(

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  6. me encanta tu historia linda , gracias por compartirla y que dolor, pero a veces la vida nos da buenas sorpresas cuando menos lo esperamos espero que esto pase con Ed y Bella

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  7. si , muchas gracias por compartirla
    fue un momento muy lindo/doloroso
    saludos

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