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martes, 21 de febrero de 2012

Maldición

Capítulo 1



Adara caminaba por las calles poco transitadas de la ciudad, el día era frio y húmedo. Muchas personas preferían evitar ese tipo de clima, no era su caso, le gustaba la sensación de frescura en sus mejillas.
Caminar de la escuela hasta la casa que compartía con Zander era relajante, amaba mirar a su alrededor, los humanos eran de lo más divertidos la mayoría del tiempo.
Le fascinaba observar las montañas que rodeaban la pequeña población, le daban un aire misterioso a la panorámica.
Se detuvo en una gasolinera para abastecerse, aun tendría que caminar un tramo más hasta llegar a la sección de casas privadas en la zona lujosa de la ciudad.
Entró en la tienda del lugar y fue directa hacia su única debilidad.
Tomó la tira entera de tutsi pop y sonrió antes de escuchar la voz del hombre, incluso aunque aun estuviera fuera.
-Asesinaron a una chica cerca de Sierra Leona

 
Reconoció la voz antes de salir del pasillo y dejarse ver.
El policía era el padre de uno de sus compañeros de clase, era uno de esos hombres maduros que le encantaban, a decir verdad la única vez que lo había visto había tenido problemas para controlarse, había ido a su casa para un trabajo escolar, entre el poli y su hijo adolescente  con la misma genética, Adara había querido comérselos a los dos o que ellos la comieran a ella.
Su cerebro recordó las palabras del hombre y su temperatura se enfrió de golpe, otro asesinato.
El policía la miró y le sonrió, deteniendo la conversación con el empleado de la gasolinera, debía pensar que no era “adecuada para sus oídos”.
-Hola, señor Parker-, saludó ella aleteando las pestañas, los hombres se quedaron embobados mirándola, al parecer aun no controlaba lo bastante su cuerpo, luchó por atar su demoniaco encanto y se acercó a pagar las paletas.
-Hola, Adi-, saludó el policía con el maldito apodo de la escuela, le molestó pero también ayudó a calmar sus feromonas.
Pagó, guardó sus tutsi y se despidió del hombre, salió de la tienda y siguió su camino, debía recordar controlarse con los humanos, al menos con los que conocía, el hombre tenía una linda familia humana y había en él un alma buena.
Ella no le iba a ser las cosas difíciles complicándole los pensamientos, haciendo que cayera idiotizado por una “adolescente” a pesar de que fuera más vieja que él, muchísimo más vieja.

Conforme recorría el resto del camino, su lujuria dormía y su mente corría pensando en el crimen del que había estado hablando el hombre, su enojo provocaba que su piel se sintiera caliente y sus uñas se alargaran un poco enterrándose en la palma debido a los puños cerrados.
Eran tres mujeres ya, el maldito vampiro se había estado burlando de ellos, dejándolas secas.
¡No más!, estiró sus dedos y se obligó a relajarse.
Miró hacia el camino, giró la cabeza de derecha a izquierda sin mirar ni oír a nadie cerca.
Cerró los ojos y pensó en Zander, al abrirlos se encontraba fuera de la propiedad que actualmente era su casa.
Hizo una mueca ante el estirón de su estomago, nunca había sido demasiado buena para la transportación.
El viento chocó contra su cabello, hebras de color rojizo nublaron su vista, las recogió todas y sacó una de las gomas para cabello que siempre guardaba en sus vaqueros y lo ató en una coleta alta.
Entró a la casa sin necesidad de forzar el cerrojo, Zander jamás había sido muy precavido con la seguridad del nuevo siglo.
No podía culparlo, a veces era divertido asustar a esos tontos mortales que intentaba realizar algún delito.
Pasó la estancia principal, la elegante cocina, el enorme comedor, y siguió por el pasillo hasta la puerta del estudio.
Las delirantes notas del violín vibraban contra las paredes, era una pieza estrambótica sin la tranquilidad que el instrumento apreciaba.

Tal vez debería atarle una mujer a la cama, unas cuantas “estocadas” y su amico volvería a la normalidad, como demonios, les habían sido privadas muchas cosas, pero no así la adoración de los humanos.
¿Por qué no podía apreciarlo?
-Lo vas a romper-, habló ella sin abrir sus labios
Zander dejó el arco suspendido cerca de las cuerdas y la miró, después con una mueca irónica, le siguieron las notas de una lenta melodía.
Adara sonrío, el gusto por aquel instrumento se había quedado arraigado en él desde la época de duques y condes, mientras él tocaba en salones y entretenía a damas embelesadas ella le había otorgado el dote de esposo cornudo, no era que él hubiera sido fiel o que entre ellos existieran votos genuinos, era solo una actuación, como la de ahora, los simples adolescentes.
Se sentó en uno de los sillones mirándolo, el estudio era la única parte medianamente favorita para Zander en esa casa.
-Creí que tardarías más-, dijo él cuando la melodía terminó
-Volvió a hacerlo-, explicó Adara con los dientes apretados, él entendió su tono, ese maldito vampiro estaba violando y asesinando mujeres humanas y se había estado burlando en su cara.


Zander guardó el violín en su estuche con lentitud y salió del estudio con su amico siguiéndole los pasos, una de las mejores cosas de pasar una eternidad con la otra parte de ti, no había necesidad de explicaciones insulsas.

El sótano de la casa era una extensa bodega de armamento “especial”, por decir lo menos.
Así como ellos podían morir, todos los seres sobrenaturales que había afuera también, los humanos no habían estado muy alejados es sus historias, metal, luz, veneno, maneras especificas para cada raza.
Adara se colocó una pistola en la cintura del pantalón escondiéndola con la chamarra que llevaba y sujetó su daga favorita mientras Zander se preparaba.
-Esto se ha salido de proporción-, le dijo mientras él asentía, guardando estratégicamente una pequeña arma en su tobillo.
-¿Crees que el maldito sepa que la parte alta de la sierra es territorio de licántropos?-, le preguntó mientras  ella se encogía de hombros.
-La realidad no importa, ningún perrito impedirá que yo misma asesine a ese bastardo-, le aseguró Adara
-¿Quién demonios dijo que tu lo matarías?-, le preguntó él sonriendo antes de desparecer, ella entrecerró los ojos y lo siguió a través de sus pensamientos.

*  *  *

El escenario del crimen estaba envuelto en un silencio casi aterrador, las casitas pintorescas que colindaban con la zona boscosa estaban de luto, no había ningún humano en las entrecalles, Zander se detuvo entre la maleza, los policías se alejaban en las patrullas con el cuerpo ya al resguardo de la morgue.
La teoría de los humanos se inclinaba hacia un culto satánico, irónico que en su ciudad hubiera dos demonios tratando de ayudarlos.
Adara apareció justo tras de él.
Y después el gruñido de tres lobos los rodeó.
-Genial, los perritos han aparecido-, le murmuró ella.
Zander sonrió y se giró hacia los licántropos, los árboles de aquel terreno boscoso casi hacían invisibles a las criaturas que ahora mismo mostraban los dientes de forma intimidante.
-No hemos hecho nada para amenazarlos, deberían saber que no se ataca a un demonio, sería una estupidez-, habló él con altanería
El lobo alfa bajó la cabeza hacia sus dos acompañantes y pronto aquellas criaturas dieron paso a tres hombres desnudos, no parecía afectarles para nada aquella situación.
Adara arqueó una ceja y Zander rodeó los ojos.
-Tal vez nos venga bien algo de diplomacia-, le sugirió mentalmente mientras ella se pasaba la lengua por los labios.
-El vampiro pagara con su vida-, murmuró Adara tan atrayente como era de esperase.
-Ahora es nuestra lucha demonio-, dijo el alfa firmemente. 
Era de esperarse esta complicación, el chupasangre había atacado en su territorio
-No lo es, nuestra existencia tiene un objetivo, pagará, pero si a caso inician una batalla, también ustedes lo harán-, sentenció Zander.
-¿Nos amenazas?-, habló otro de los hombres mucho mas joven que el líder, sus ojos pasaron por Adara mientras él sonreía.
-¿Querrías amenazarlo?-, le preguntó él, ella arqueó una ceja.
-No es como si no te fuera a gustar, hombrecito-, aquel joven frunció el ceño, uno de los poderes de una mujer demonio era la proyección de imágenes, reales o falsas, ahora mismo ser sometido por Adara era una visión que un hombre no podría soportar. Se volvería loco de deseo, Zander lo había visto con los años, era una de las mejores armas de su amico, era más fácil matarlos si en lo único en lo que podían pensar era en hacer aquellas imágenes realidad.
El alfa le gruñó a Zander y Adara puso cara inocente.
-Jamás confíes en una de su clase, Cam-, dijo otra mujer, con un top y vaqueros raídos mientras se unía  a los tres licántropos, el tipo tensó la mandíbula, la miró y se acercó a ella apenado.
-¿Amor?-, preguntó su amico a Zander con voz casi asqueada.
El sonrió.
-Mejor te olvidas del perrito, las lobas suelen ser demasiado territoriales-, le dijo casi con burla.
-Necesitamos que nos dejen registrar su territorio-, pidió él volviendo a la seriedad y centrándose en los licántropos
-Si nosotros lo capturamos será nuestro-, fue la respuesta del alfa.
-Si llegan a hacerlo-, terminó Adara.
-Sasha, acompáñalos a donde encontraron a Lara-, pidió el líder después, la loba hizo una mueca y pasó entre ellos mientras comenzaba  a caminar.
Zander admiró la figura de aquella mujer, cada uno de sus músculos estaba tonificado, mucho mejor que cualquier humana que hubiera visto.
Su piel canela parecía brillar a la luz de la luna, era de verdad hermosa.
-Tú puedes tenerla y yo podría volver a castigar a ese Cam-, Adara sonrió mientras lo miraba y él le tapó la boca mentalmente.
-¿El vampiro recuerdas?, o dejaras que yo me encargue-, ella entrecerró los ojos, toda la aura de excitación a su alrededor de desvaneció, lo que agradeció, si ella estaba excitada él podía sentirlo, por lo que Zander solo había estado pensado en las piernas de Sasha en todo el camino.

Habían atado el cuerpo  de la chica a un árbol, ellos aun podían oler la sangre, la loba se quedo estática mientras Zander se arrodillaba frente al grueso tronco.
Adara sintió un estremecimiento en la columna, él giró sus ojos y los dos comenzaron a correr.
-¿Qué diablos…?-, Sasha gritó antes de que comenzara a seguirlos.
-Él aun sigue aquí-, gritó Zander
La mujer cambió a su forma animal, un modo de avisar a sus compañeros de manada mientras los seguía.


Adara  en realidad no necesitaba observar, seguía el instinto de Zander como si fuera el propio.
Los árboles rozaban sus cuerpos mientras el olor se intensificaba hasta que lo miraron, estaba completamente relajado con una mano contra el tronco de un viejo árbol.
-Soy tan importante para tener a demonios persiguiéndome-, se regodeó el vampiro mientras Zander se detenía por completo.
-Tu puedes atarme cariño-, le dijo a Adara después.
-Y arrancarte la cabeza idiota-, siguió ella, el maldito enfermo era rubio y bello como el que mas de su raza, aunque sus ropas y su aspecto dejaban que desear, más un renegado que alguien estilizado.
-Jackson, llámame Jackson-, sugirió
-Has cometido crímenes imperdonables-, comenzó Zander atrayendo su atención.
-¿Según quien?-, replicó el vampiro
-Mi naturaleza es cazar seres humanos-, se explicó.
-Puedes ahorrarte tus excusas, sabes lo que pasará-, le interrumpió Adara.
-Yo si, ustedes no-, les sonrió.
Zander entrecerró los ojos mientras su amico se disponía a interceptarlo por la espalda.
-Nos volveremos a ver hermosa, serías espléndida en mi colección-, le aseguró el tipo con una sonrisa centellante, Adara desapareció, Zander saltó tratando de atraparlo entre ellos antes de que el vampiro echara a correr de nuevo.
-¿Qué diablos?-, exclamó Zander
Se había desvanecido, de la nada, se había esfumado en sus ojos.
-Los vampiros no pueden hacer esto-, le recordó Adara.
-Eso es por que no esta solo-, les interrumpió el alfa.
Solo él estaba en su forma humana, había cinco lobos mas mirándolos con hastío y rabia.
-Ocultarnos cosas no nos ayuda-, le gritó Zander.
-Lara no lo hubiera seguido, no hubiera sido seducida por un vampiro, las otras humanas podrían hacerlo, no una compañera de un lobo-, explicó el alfa.
-¿Estas diciendo que alguien le da a las mujeres en bandeja de plata?-, preguntó Adara molesta.
-No hay forma de que un chupasangre engañara a nuestra gente, les temen, corren al menor vistazo, hay alguien más-, sentenció, con la impotencia marcada en el rostro del hombre, volvió a su estado natural, siendo un enorme lobo negro.
-Maldición-, exclamó él cuando los licántropos se alejaron.
-¿Quién ayudaría a un vampiro sin beneficiarse también?-, inquirió su amico y él simplemente negó con la cabeza
-La próxima vez haré que se tragué cada palabra-, le aseguró Adara con sus puños cerrados, la sangre comenzaba a salir de una de sus palmas debido al alargamiento de sus uñas
-Cálmate
-No es nada-, le contestó ella lamiendo la herida, demasiado molesta.
                                                                                                                              
Él se sentía exactamente igual pero su cuerpo parecía cansado, ninguno se había dado cuenta que había una loza pesada en el ambiente, como si alguien estuviera debilitándolos a propósito, Adara cerró los ojos y el la siguió, ambos desaparecieron para regresar a casa.
-Definitivamente alguien esta ayudándolo-, exclamó Zander entre dientes, se recostó en uno de los sillones mientras ella deshacía la coleta de su cabello, las espesas mechas de color rojizo cayeron hasta su cintura.
Le miró la mano aun con una mancha de sangre en su piel.
-¿Estás bien?-, le preguntó y ella se rió suavemente
-¿Cuándo te ha importado?-, inquirió alejándose rumbo a su habitación

Tanto Adara como él sabían que nunca dejarían de estar conectados, asi que nunca dejaría que algo le pasara, esa también sería su muerte.
No era preocupación, era mero instinto de supervivencia.
Eran la mitad de un todo, siempre sería así
Eran una sociedad perfecta.
Una sociedad que mataría a ese vampiro prepotente y a quien fuera que lo ayudara.





7 comentarios:

  1. Buenisimoo Cel que primer capitulo espectacularr...espero que encuentrenn otra vez al vampiro y puedan acabar con el..!!! me gusta mucho esta nueva historiaa!!! nos leemos en el que siguee...besos!!!!!

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  2. ¡me gusta Adara!

    Gracias por este capitulo Cel, me gustó mucho, lo único que espero es que puedan matar al chupasangre ese!!!

    Vivianne

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  3. Me gusta el rumbo que va tomando la historia, espero el proximo capi Cel :)

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  4. Muy muy buen cap!!!!! simplemente genial

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  5. AHHH ME PREGUNTO QUIEN ESTARA AYUDANDO A ESE VAMPIRO... JEJEJE EN FIN GRACIAS POR EL CAPI.. EJJEE
    SALUDOS

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